Reseña Madball junto a Agnostic Front en Colombia

MADBALL
AGNOSTIC FRONT
DETERMINACIÓN
STEPS
NO DEPENDIENTE
VICTIMIZED

Bogotá, Teatro La Mama
Sábado 14 de noviembre del 2009

LAZOS DE SANGRE



Integridad y devoción por sus seguidores a destajo. Eso es lo que sintetiza a Madball, la institución del hardcore de la gran manzana que por segunda ocasión en sus veinte años de carrera se aventuró a pisar suelo de colombiano; en esta última oportunidad con el aliciente de compartir tarima con sus hermanos Agnostic Front. Una dupla letal del sonido urbano que convirtió el diminuto escenario del barrio Chapinero en un campo de batalla. Dejando a un lado las patéticas modas y los revueltos de subtendencias que vienen todas a sonar a lo mismo, este show permanecerá intacto en la memoria de los adeptos al apasionado y honesto genero como la suma de dos de las formaciones más legendarias dando todo de sí para unos cuantos afortunados.

¿Qué demonios pasa con la movida del hardcore en una ciudad que se ufana de tener espacio para cuanta movida cultural se engendra? Esta música no puede haberse convertido de la noche a la mañana en el espacio para lucir coloridos tatuajes y osadas perforaciones en el centro comercial y ausentismo a la hora de asistir a shows fundamentales. Por acá se asomaron las mismas caras conocidas. Si hace un año no cabía un alma más en La Mama para ver a Agnostic Front su retorno junto a Madball no llamó a más de 300 personas. Tal parece que algunos solo piensan en la ropa, otros en que Agnostic Front esta pateando traseros desde hace 30 años y por ello estaban acá.

El penetrante olor a sudor se hacia evidente desde la acera de enfrente al recinto. A eso de las 4 de la tarde, el señor Roger Miret y compañía ya despachaban misiles de la talla de “For My Family”, “Gotta Go” y “Addiction” ante el delirio de los que “madrugaron” a la cita. El anticipado itinerario del espectáculo correspondió a la apretada agenda que llevaban los conjuntos estadounidenses que les obligaba a partir esa misma noche a su siguiente destino: Lima, Perú. Por tal razón, no tuvimos chance de apreciar los actos locales y buena parte de la presentación de Agnostic Front. No obstante muy pocos llegaron después para reclamar el tempranero arranque de los titanes de New York.

Con la temperatura y los ánimos bien arriba, se asomaron a la tarima Madball, unos auténticos héroes para los transpirados espectadores. Como la cosa era de ansias y de tiempo no hubo lugar para baches ni discursillos refritos: “Our Family” dio la partida con el foso convertido en un ciclón humano. Las referencias a la unidad entre la comunidad hardcore y los lazos de sangre entre los vocalistas de ambas formaciones, Roger Miret y Freddy Cricien no se hicieron esperar. El conjunto presentó temas de su reciente entrega discográfica “Infiltrate The System” como “We The People” o la que da nombre al álbum junto a esenciales y demoledoras composiciones de la talla de “Smell The Bacon”, “Demostrating My Style”, “Get Out”, “Look My Way”, “Down By Law”, “For My Enemies” o “Heaven-Hell”.

El carisma del vocalista Freddy Cricien lo envidiaría cualquier agrupación; dedicando sentidas palabras de agradecimiento a la audiencia con su español de acento caribeño y llevándolos a continuación a realizar aniquiladores pogos y licuadoras. El grupo desafortunadamente no contó con el emblemático bajista Hoya en razón de que su esposa se hallaba delicada de salud. Su lugar lo ocupó el enérgico Mike The Gook (Cro-Mags, Shelter) acompañado por los contundentes riffs de Mitts y el punch en batería por cortesía de Ben Dussault, cobijados bajo un sonido bastante correcto.

“Pride” en español remeció las columnas del teatro. No hay duda que la conexión de lengua y raigambre latino en Madball son la clave del aprecio que se les tiene por estos lares. Más palabras de respeto y cariño para la banda de su hermano dedicó el frontman, otras no tan amorosas a la violenta capital del mundo y posteriormente recordó que antes que un norteamericano el es un latino más como cualquiera de los presentes. Entonces la solicitadísima “100%” embistió para que el cierre fuera apoteósico, con todos y cada uno en el teatro gritando cada silaba con los puños al aire.

A las seis de la tarde las puertas se abrieron dejando salir una densa nube de vapor, evidencia de la frenética acción que se vivió adentro. Lo recalco, uno de los shows más honestos, brutales y fraternos de los que he sido testigo. Lastima por los que se lo perdieron, tal vez sus intereses estén en la pasarela, no en la música.

Alejandro Bonilla Carvajal
Fotografías: Fabián Esteban Beltrán